En el Monte Santa Tecla en la localidad de La Guardia (Pontevedra) se puede visitar un magnífico Castro restaurado y bien cuidado que además tiene unas impresionantes vistas sobre la desembocadura del río Miño.
Esta antigua ciudad es uno de los mejores ejemplos de la llamada cultura castreña. El origen de esta cultura se remonta a mediados del siglo VIII, en el noroeste de la Península Ibérica, cuando aparecen los primeros poblados de carácter estable, denominados castros o citanias, una forma de hábitat no exclusiva de esta zona pero que en ella alcanza su máxima expresión. El esplendor de este horizonte cultural se sitúa ya en plena época de la dominación romana, siendo ejemplo de los castros mejor conservados el castro de Santa Tecla.
Además en varias de las piedras del monte se encuentran petroglifos elaborados 2.000 años antes de la ocupación del castro.
Si lo que buscáis en un enclave turístico es algo de cultura, a la vez que un lugar lleno de construcciones y entornos dignos de ver, este Monte de Santa Tecla es sin la menor duda una visita obligada para aquellos que disfrutan de la naturaleza y la cultura gallega.